Los Mayos a la Virgen de Loreto

Ya estamos a treinta

del abril cumplido,

mañana entre Mayo

Mayo bienvenido.

 

Bienvenido Mayo,

bienvenido seas,

regando cañadas,

casando doncellas.

Gracias a Dios que he llegado

a la puerta de este Templo,

a darle las buenas noches,

a la Virgen de Loreto.

Así ,para proseguir,

amparado del silencio,

el discurso en la memoria,

en Vos solo el pensamiento.

Ayudándonos tu gracia,

saldremos bien de este intento

¡Atención, pido, señores,

pues necesito el silencio!

A tu puerta, Virgen pura,

llego rendido y postrado,

solicitando licencia

para cántaros el Mayo.

Licencia te pido a Ti,

a vuestro padres y hermanos,

a tu Santo y sacro Hijo,

y al Padre que lo ha creado.

Concedida la licencia,

de este Misterio sagrado,

proseguiré sin temor

a cántaros vuestro Mayo.

¡ Detente noche, no corras!

¡detened hermosos astros!

¡Parad, estrella luciente!

¡Páraos, lucero claro!

 

¡Escuchad, pues de María

sol, luna, lucero y astros,

la dignidad y grandeza,

de su Misterio más alto !

De esta Casa de merced,

de este Monasterio Santo,

de este Vergel tan frondoso,

y de esta Torre de ramos.

Donde obró la encarnación

aquel Misterio tan alto,

donde vino San Gabriel,

del padre Eterno mandado.

Y concibió con pureza,

sin la mancha de Pecado,

quedando, Esposa, Hija y Madre

del mismo que la ha creado.

Es poca mi explicación,

para poder explicaros

aquel Divino Misterio,

del Verbo Dios encarnado.

¡Ayudadme mis devotos

pues que yo solo no alcanzo,

y cantaremos sus Glorias

en esta noche de Mayo!

Pero antes, Virgen María,

es preciso saludaros,

como hizo San Gabriel,

aquél Arcángel Sagrado.

Y nosotros muy humildes,

con la Salve os saludamos:

¡Dios te salve Virgen Pura,

Vida y Bien de Ti esperamos!

Madre de Misericordia

de los mortales consuelo,

vida y esperanza nuestra,

y de todo mal, remedio.

                                          

  Página 1

¡Dios te salve, a Ti llamamos

en este triste destierro,

desterrados hijos de Eva,

te suspiramos gimiendo!

¡ Ea, pues Señora Nuestra

en este alcanzar Supremo

Angeles y Querubines

os están cantando versos!

¡Vuelve a nosotros Tus ojos

de Misericordia llenos,

por el tiempo en que tuvisteis,

aquél inmenso Cordero

En tu vientre virginal

de bien del Universo ¡

¡Oh, piadosa, Oh, pía!

¡Oh dulce regalo nuestro¡

Que seamos en la tierrra,

de las virtudes ejemplo,

y después que nos llevéis,

a gozar bienes del Cielo.

¡ Templo de la Majestad¡

y de la Trinidad Santa,

del linaje de David,

llena de virtud y gracia.

No hay galardón que os iguale

y en todo lleváis ventaja,

en belleza y dulzura

no hay comparación que valga.

 

 

No digo más, que no es fácil,

la Poesía me falta.

imposible pronunciar,

las Eternas Alabanzas.

Ahora, os suplico y ruego,

me concedáis esta gracia.

¡Sea José, vuestro Mayo,

también de Familia Santa.

Que en su mano floreció,

un palo que seco estaba!

¡Ay quién fuera Salomón,

sabiduría tan alta,

para cántaros los Salmos,

de aquella Historia Sagrada!

¡Y verían tus devotos

calificada tu Gracia,

pero humildes os rogamos,

con nuestras pobres palabras!

¡Tengamos Paz en el Mundo,

y de frutos abundancia

y que en la Gloria os cantemos

tus eternas alabanzas!

Virgen Santa de Loreto

el Mayo te hemos cantado,

como obligación de siempre

nunca te hemos olvidado.

¡Adiós, adiós, Virgen Pura

te pedimos y rogamos,

que nos des mucha salud

para cantarte otro año¡

                                           Página 2

Asociación Cultural Amigos de Venta del Moro